Lectio Divina
La fuente principal de inspiración de la vida benedictina es la Palabra de Dios, a la que cada monje o monja dedica las horas más silenciosas y recogidas del inicio y del fin del día.
La LECTIO DIVINA es un medio precioso para llegar a la contemplación de las cosas divinas y acrecentar el deseo de la unión con Dios en la oración. En la Lectio divina el monje habla sinceramente con el Señor y sobre todo, le escucha.
La Lectio divina es lectura orante de la Palabra de Dios y también es enriquecida con la lectura de los escritos de los Padres de la Iglesia y con autores espirituales de todos los tiempos.
En la Sagrada Escritura el monje descubre el camino espiritual del alma. Dios le sale al encuentro a través de su Palabra y el monje encuentra a la vez como debe responder a Dios.
San Gregorio Magno decía: “Scriptura cum legente crescit” –la escritura crece con el que la lee- es decir que cuanto más se progresa en la contemplación, más se comprende la Escritura.